Sequía y DANA, la «inestabilidad» meteorológica a la que España ya se ha acostumbrado
El Panel Internacional de expertos en Cambio Climático (IPCC) advirtió el año pasado que España se encuentra en la «zona cero» del cambio climático y que, de no reducir los niveles de emisiones de efecto invernadero, las amenazas meteorológicas irán a peor. Los fenómenos meteorológicos adversos son cada vez más frecuentes en Europa, pero en España ya estamos acostumbrados a una supuesta inestabilidad que pasa de cielos despejados y olas de calor a lluvias torrenciales en unos pocos días.
Mirar al cielo con el agua en España es una costumbre que se ha adquirido tras ser testigos de temperaturas demasiado altas que se traducen en olas de calor, sequías cada vez más recurrentes y severas y varios ciclos de escasez de agua, con los impactos socioeconómicos y ambientales que todo ello conlleva. El último boletín hidrológico, el número 36, que analiza la evolución de los recursos hídricos y pluviometría desde el 29 de agosto de 2023 hasta el 5 de septiembre de 2023, indica que los embalses españoles se encuentran al 37 % de su capacidad, la que es ya la cuarta semana seguida por debajo del 40 %. Si bien esta cifra supone un 2 % más por encima que el año pasado en esta misma semana, es casi un 15 % menos que la media de los últimos diez años.
Redacción iAgua