Lavanderas: memoria histórica
Un emotivo acto sirve para distinguir a las protagonistas, algunas todavía vivas, del oficio ya perdido de lavar la ropa a mano
Las representantes aún vivas de las lavanderas de La Laguna han vuelto al lugar donde ellas y las generaciones anteriores desarrollaron durante siglos su labor: el Tanque Grande del Camino de las Peras. A partir de ahora su entrada la preside una escultura, obra del artista Ibrahim Hernández, que rinde tributo a este oficio perdido de lavar a mano. El alcalde de Aguere, Luis Yeray Gutiérrez, descubre la placa de homenaje durante un emotivo acto. Lo hace en presencia de Darkis, Lupe y Pura, hoy ya abuelas y entonces niñas, a las que sus madres enseñaron los secretos de la mejor colada.
El alcalde resalta que con la obra de Hernández, al que agradece su trabajo, “se recupera la historia del municipio y se rinde homenaje a las mujeres que desempeñaron este oficio callado, humilde e imprescindible”. Luis Yeray está acompañado por la concejala de Patrimonio Histórico, Elvira Jorge. Gutiérrez manifiesta que con este acto «muy emotivo y sentido queremos hacer honor a un oficio que no se reconoce, a pesar de todo lo que dio a nuestro municipio por la estrecha relación de La Laguna con el agua». Añade: «Nos llena de orgullo recuperar nuestra historia y ponerla en valor, empoderando a la mujer y dándole este homenaje merecido por su valentía, sacrificio y sufrimiento”.