Las depuradoras, las fuentes y las piscinas son los focos municipales de mayor contaminación
UNA PUBLICACION DE –JAVIER DARRIBA
Tres de cada cuatro toneladas de CO2 emitidas desde equipamientos locales tienen que ver con el ciclo del agua.
Tres de cada cuatro toneladas de dióxido de carbono que se emiten desde los edificios y equipamientos municipales proceden de las instalaciones de Emalsa. La gestión del ciclo del agua, incluyendo la desalación y la depuración, requiere del consumo de 128.303,81 megavatios a la hora, lo que supone la producción de 99.563,76 toneladas de CO2, cuando el total de las instalaciones municipales -incluidas las de Emalsa- son el origen de 133.324,75 toneladas de estos gases de efecto invernadero.
Así aparece en el Plan de Acción para el Clima y la Energía Sostenible (Paces), que fue aprobado en el último pleno del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria y que pretende reducir las emisiones de dióxido de carbono de la ciudad en un 40% -respecto a los valores de 2012- de cara al año 2030 mediante un potente paquete de inversiones que alcanza los 425,03 millones de euros, tanto en propuestas de mitigación como de adaptación.