La Cámara Insular de Aguas niega que esté en contra de la desalación
La Cámara Insular de Aguas de Tenerife aclara que no está en contra de la desalación de agua, “cuando así sea necesario y en las zonas donde la producción no satisfaga la demanda”. Por otra parte, la Institución se congratula de que los organismos públicos empiecen a ser sensibles con las pérdidas de agua de las redes de distribución públicas.
En concreto, la Institución, que engloba a los productores de agua de la Isla, considera que las necesidades de agua desalada deben valorarse “una vez se haya solucionado las escandalosas pérdidas que padecen las redes de abastecimiento público”.
Según la Cámara, otro de los aspectos a tener en cuenta, es la cantidad de agua que se vierte al mar sin depurar, con el impacto medio ambiental que ello supone. “Esta agua una vez tratada, podría ser utilizada por la agricultura y riego de jardines. Este es otro factor con el que tendrían que contar las instituciones públicas a la hora de proyectar las necesidades de desaladoras en la Isla”, añade la Institución.
Desde la Cámara proponen que sea el Consejo Insular de Aguas de Tenerife (Ciatf), el órgano que vele y sancione a las demás instituciones públicas y privadas, cuando estas no tengan su red de abastecimiento en óptimas condiciones.
Los productores de agua puntualizan que, en otras ocasiones, han alertado de que en Tenerife se pierde una cantidad escandalosa de aguas potables por la red tuberías públicas, así como que debieran ser gestionadas de un modo más eficaz por las instituciones públicas. “Más de la mitad de esa agua se dilapida desde hace décadas sin que se ponga una solución definitiva a tales desmanes”, añade la Institución.
La Cámara destaca que, “como ha quedado de manifiesto recientemente, el uso que se está dando a las aguas depuradas en Tenerife no es el óptimo”.
Desde Institución recalcan que están convencidos que se podría reutilizar más cantidad de agua depurada en la agricultura, “que es uno de los grandes consumidores en la Isla, pudiendo optimizar la eficiencia en el uso de la que sale de nuestras galerías y pozos”. “Por lo tanto, consideramos que se deberían hacer más esfuerzos en instalar depuradoras en vez de desalinizadoras”, concluyen.
Fuente: http://www.laopinion.es/