Invertir en agua para un futuro sostenible y un negocio rentable
La sostenibilidad y la eficiencia están en el foco de una sociedad que demanda, desde todos los ámbitos, compañías que demuestren un compromiso real con estos ámbitos. La transformación digital en el sector del agua no afecta solo a las operaciones, sino también a su relación con el cliente y a la captación del talento. El cambio hacia la digitalización, pues, ha pasado de ser una recomendación a convertirse en una necesidad de presente.
Tradicionalmente, el sector del agua ha sido uno de los más rezagados a la hora de adoptar los cambios. Mientras todo iba bien y el agua seguía fluyendo, ha habido pocos incentivos para cambiar y las compañías han evitado adoptar nuevas medidas, tecnologías digitales o transformar sus tácticas operativas, en parte porque históricamente los márgenes eran estrechos y el agua ha sido un recurso muy a menudo infravalorado.
Sin embargo, la creciente demanda de servicios de atención al cliente, la presión por gestionar unos recursos hídricos que son limitados y la tendencia a tomar una visión más circular del ciclo del agua, han hecho que la adopción de nuevos sistemas y tecnologías haya dejado de ser una opción. En una industria altamente competitiva y regulada, ahora se ha convertido en algo fundamental. Y no solo eso, sino que las industrias de todo el mundo son más conscientes de las ventajas derivadas de las tecnologías digitales, especialmente tras la pandemia, que ha evidenciado la enorme amenaza que existe para la resiliencia del sistema del ciclo del agua.
Las compañías pueden sentirse orgullosas de haber prestado servicios fiables durante más de cien años, pero sus operaciones diarias siguen siendo básicamente las mismas. Por esta razón, es vital que apuesten por la innovación y que transformen sus negocios para mejorar la eficiencia y la sostenibilidad de todo el sector. Las tecnologías digitales emergentes jugarán un papel fundamental en este sentido y las empresas deben abrazar las oportunidades que se les presentan y ser más ágiles y digitales en un momento en el que la contratación también cambiará.