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Bruselas quiere nuevos poderes de emergencia frente a crisis de suministros

La Comisión Europea propone un mecanismo que le dará poder para pedir a las empresas que reorienten su producción en caso de crisis

La pandemia de covid-19 puso de manifiesto que el mercado interior europeo no es perfecto. Las medidas unilaterales adoptadas por los Estados miembros al inicio de la crisis sanitaria y la falta de transparencia obstaculizaron la libre circulación de suministros vitales, como respiradores o mascarillas, cuando más se necesitaban, complicando la respuesta europea y agravando la situación. Para evitar que se repita una experiencia similar la Comisión Europea ha propuesto este lunes un nuevo Instrumento de Emergencia del Mercado Único que le permita reaccionar “con rapidez y de forma colectiva”. La iniciativa, que ahora deberá ser negociada y acordada entre Consejo y Parlamento Europeo, otorga nuevos poderes al Ejecutivo comunitario, incluida la posibilidad de obligar a las empresas a expandir o redirigir su producción.

El mecanismo establece tres fases de actuación: modo de contingenciamodo de vigilancia y modo de emergencia. En la primera fase, el objetivo será preparar planes de contingencia y crear una red de coordinación y comunicación para mejorar la preparación. La segunda fase, el modo vigilancia, entrará en acción si se detecta una amenaza al mercado único. En este caso, Bruselas y los Estados miembros tendrán que hacer un seguimiento estro de las cadenas de suministro de bienes y servicios estratégicos. También tendrán que constitución reservas estratégicas. En caso de una crisis con un amplio impacto en el mercado único, los Estados miembros podrán pasar a la tercera fase y activar -por mayoría cualificada- el modo de emergencia.

El mecanismo establece tres fases de actuación: modo de contingenciamodo de vigilancia y modo de emergencia. En la primera fase, el objetivo será preparar planes de contingencia y crear una red de coordinación y comunicación para mejorar la preparación. La segunda fase, el modo vigilancia, entrará en acción si se detecta una amenaza al mercado único. En este caso, Bruselas y los Estados miembros tendrán que hacer un seguimiento estro de las cadenas de suministro de bienes y servicios estratégicos. También tendrán que constitución reservas estratégicas. En caso de una crisis con un amplio impacto en el mercado único, los Estados miembros podrán pasar a la tercera fase y activar -por mayoría cualificada- el modo de emergencia.

https://www.eldia.es/economia/2022/09/19/bruselas-quiere-nuevos-poderes-emergencia-75651725.html

Una publicación de: Silvia Martínez