Ahorrar agua en casa, mucho más fácil de lo que crees
Debemos ser conscientes que el consumo doméstico no es el principal problema del tremendo derroche de agua que se produce en España, pero sí es cierto que si los ciudadanos adquiriéramos hábitos de consumo más sostenibles, nos convertiríamos en parte de la solución y no en una parte más del problema.
El consumo doméstico de agua en España se ha moderado en los últimos años, actualmente está en torno a 160 litros por persona y día, mientras que hace dos décadas rondaba los 2oo litros por persona y día, pero debemos seguir mejorando y avanzando más rápido hacia la eficiencia, practicando la eficacia.
Existen muchas prácticas cotidianas que nos pueden ayudar a ahorrar agua en el hogar, en ese sentido además, conseguimos sentirnos mucho mejor con nosotros mismos.
Algunas mejoras están ya dictadas directamente desde la tecnología, como por ejemplo la ya mencionada en este blog etiqueta energética o los sistemas de doble descarga de los inodoros.
Sobre los hábitos que podemos hacer nosotros mismos podemos destacar:
- Ducha en lugar de baño, que puede suponer un ahorro de unos 200 litros.
- Un correcto uso de los electrodomésticos que más agua consumen, como la lavadora y el lavavajillas.
- No cepillarse los dientes con el grifo abierto, pues puede suponer un derroche de hasta 15 litros de agua.
- Utilizar depósitos de aguas grises para la cisterna del inodoro (agua procedente de los fregados).
- Utilizar el agua de los hervidos, de los lavados de las verduras, de los remojos de las legumbres, etc., para regar las flores (toda ese agua recogida arrastra parte de los nutrientes de los alimentos que va a enriquecer a las propias plantas).
- Reutilizar el agua del acuario (si se tiene) para regar las plantas (el agua del acuario también es rica en nutrientes debido al alimento de los peces y sus propias heces).
- Utilizar el agua de lluvia para regar las plantas, bien mediante la colocación de un depósito bajo los bajantes o de una manera más tosca pero igualmente efectiva utilizando un barreño o una botella.
- A la hora de regar, colocar un plato hondo bajo el tiesto de la planta y regar el plato en lugar de la planta. Para hacerlo más divertido se puede utilizar una garrafa de plástico a unos 3 cm. y decorarla, para así hacer partícipes a los niños de esta cultura de la eficiencia. Es importante recordar que las plantas de maceta sufren más por el exceso de riego que por el defecto.
- Colocar aireadores o espumadores en la boca de los grifos, de ese modo se consigue que el torrente de agua sea menor y permite un ahorro de prácticamente la mitad de agua consumida por el grifo.
- Utilizar pequeños barreños de agua en la ducha y almacenarla mientras sale el agua caliente y reutilizar ese agua para regar las plantas o para recargar la cisterna del inodoro.
Como vemos, toda esta serie de consejos no son más que practicar el sentido común en nuestros hogares para conservar agua. La ecología doméstica se basa en eso, aprovechar los principios de la eficiencia y el sentido común para no tener que renunciar a nuestras comodidades.
Fuente: http://www.iagua.es/